sábado, 16 de septiembre de 2017

LA EXPERIMENTACIÓN DE LOS ANIMALES



La experimentación animal se define como una actividad que tiene como misión evidenciar o aclarar fenómenos biológicos sobre especies animales determinadas. No obstante, también es toda acción de carácter científico o experimental que pueda llegar a suponer un ataque al estado de bienestar del animal, susceptible de causarle dolor, sufrimiento, angustia o agravio.  

 Cientos de millones de animales son utilizados cada año en pruebas de toxicidad, como recursos de aprendizaje en las facultades o modelos de investigación en diversos laboratorios de todo el mundo. Ratones y ratas, hámsters, conejos, jerbos, perros, gatos, cerdos, vacas, ovejas, reptiles, truchas, monos rhesus, diversos pájaros y muchos otros padecen nuestros experimentos de biología, bioquímica, fisiología, psicología…

Utilizar a los animales para experimentar y conseguir curas o vacunas para los humanos, es tan arbitrario como utilizar a un determinado grupo de humanos (por ejemplo, aquellos con pelo rubio para solucionar los problemas de los morenos). Nuestro color de piel, de ojos, nuestro sexo, la especie a la que pertenecemos… todas son caracteristicas irrelevantes cuando hablamos de tener en cuenta el interés de alguien en no sufrir y disfrutar de su vida. Lo único importante aquí es la posesión de dichos intereses, independientemente de la raza, el sexo, las capacidades intelectuales o la especie a la que pertenezca quien los posea.




Sobre el cuestionamiento de la validez científica de los experimentos
A menudo quienes defienden a los demás animales cuestionan la validez científica de los experimentos a los que se ven sometidos, basándose en las diferencias genéticas existentes entre miembros de diferentes especies y el hecho de que una pequeña diferencia a nivel genético tiene consecuencias negativas a la hora de extrapolar los resultados de los miembros de una especie a los miembros de otra. Pero el problema de que se someta a otros animales no-humanos a tales experimentos no es una cuestión técnica acerca de la fiabilidad de los resultados obtenidos, sino una cuestión ética de base que no puede ser ignorada.



«Si no fuese por la experimentación con animales no tendríamos el medicamento "....." que ha salvado muchas vidas humanas»
Afirmar que si no fuese por la experimentación con animales de otras especies no dispondríamos del medicamento X es una afirmación muy atrevida pues no podemos asegurar que no se hubiese podido desarrollar sin utilizar animales. De hecho, se han dado multitud de avances médicos sin la utilización de otros animales y si se invirtiesen la cantidad de recursos que ahora se destinan a experimentar animal en métodos sin animales quizás dispondríamos ya de muchos otros. La historia médica muestra el retraso producido a causa de algunos experimentos con animales  de otras especis (falsos positivos y falsos negativos).


Necesidad de uso de animales por parte de la especie humana

Necesidad de uso de animales por parte de la especie humana Los animales han sido utilizados en muchísimos estudios, pero también en multitud de casos, en que sin su uso, la especie humana habría desaparecido. El uso del animal por parte de los humanos se pude apreciar en cinco campos principales: la nutrición; el esfuerzo y el transporte; el mantenimiento de la temperatura; el conocimiento y ciencias básicas

y finalmente el campo de las ciencias de la salud. 

La NO necesidad de uso de animales en experimentación

 A pesar de lo extraño que pueda parecer, actualmente ha aparecido una nueva corriente anti-experimentación animal con base totalmente científica. Este grupo, formado por científicos con gran experiencia en experimentación animal, defiende que su uso no es ni útil ni necesario. La base principal de su teoría es: los animales de laboratorio no son hombres y, por tanto, los resultados obtenidos con los experimentos con estos animales no son extrapolables al hombre. 
Sus argumentos han provocado que la Asociación Médica Americana los tratara de ignorantes e irresponsables. Sin embargo, cada vez hay más científicos que declaran que probar en animales no es garantía de nada, y que en algún momento de la experimentación se tendrá que probar con humanos.



               Estandarización de los individuos 
Como se trata de un sujeto experimental, también nace el concepto de reactivo biológico: un animal de experiencia, en función del tema de estudio, capaz de dar una respuesta fiable y reproducible. Como ya hemos expuesto en puntos anteriores, su idoneidad para el estudio debe ser vigilada, para que su uso no sea en vano y los resultados sean fiables. La pureza del animal debe ser vigilada, controlada y contrastada. No se debe olvidar que también son susceptibles a la contaminación tanto biótica como abiótica, que puede provocar un efecto distorsionador sobre los resultados del proceso experimental. 


Especies más utilizadas 
A continuación se exponen algunas de las especies más comúnmente utilizadas, ordenadas por tamaño: Roedores y lagomorfos: Estos animales tienen características generales, que los hacen muy adecuados para su uso en el laboratorio, como su pequeño tamaño, su alta prolificidad, su facilidad de manejo y mantenimiento, etc. De hecho el ratón y la rata son las especies más usadas en el laboratorio.

6 EXPERIMENTOS EN ANIMALES SIN SENTIDO QUE ESTÁN OCURRIENDO AHORA

1. EXPERIMENTOS CON BEBÉS

Un laboratorio del Instituto Nacional de Salud (NIH) cría a docenas de monos cada año para hacerlos propensos a enfermedades mentales. La mitad de los bebés son arrancados de sus madres con el fin de causarles traumas mentales y nunca se les permite verse nuevamente.

Estos bebés sufren de miedo, ansiedad y depresión horribles. Su miseria les ocasiona pérdida de cabello, diarrea e incluso los lleva a auto-mutilarse.

En un experimento horrible, los bebés son enjaulados junto con sus madres sedadas. Los bebés aterrorizados intentan frenéticamente revivir a sus madres. En al menos un caso, se puede escuchar a los investigadores riendo mientras una madre sedada lucha para mantenerse despierta para poder consolar a su hijo.
A algunos de los jóvenes los hacen adictos al alcohol, lo que hace que su depresión empeore. ¡La peor parte es que los investigadores incluso han admitido que el trabajo no es aplicable al tratamiento del trauma sicológico ni a los trastornos cerebrales en humanos

2. LOS EXPERIMENTOS EN GATOS

En un experimento en la Universidad de Wisconsin-Madison (UW-Madison) financiado por los contribuyentes, a los gatos les perforan orificios en sus cráneos, les implantan bobinas de metal en sus ojos y los privan de comida y de agua. A algunos incluso los ensordecen intencionalmente. Los gatos son luego encerrados en dispositivos para inmovilizarlos y son obligados a escuchar sonidos procedentes de diferentes direcciones a cambio de un pequeño bocado de comida. Algunos gatos en este laboratorio han soportado este maltrato por más de 10 años.






3. LOS EXPERIMENTOS EN MONOS

Cada año, más de 100.000 monos son sometidos a experimentos en Estados Unidos. Los monos en los laboratorios son sujetos de experimentos dolorosos, invasivos e irrelevantes. Los hacen pasar hambre, los inmovilizan, los infectan con enfermedades y los saturan con químicos y drogas. Los investigadores les perforan agujeros y les atornillan objetos en sus cabezas. Finalmente, los animales son asesinados.
Los monos son encerrados en pequeñas cajas de carga y montados en aviones (a menudo debajo de los pies de pasajeros desprevenidos). A veces, a estos monos no se les da comida, agua o atención veterinaria y mueren en el viaje. ¡Estos viajes agotadores pueden tener múltiples paradas y durar más de 30 horas! Los que sobreviven son cargados en camiones y deben soportar días de traslado hacia los laboratorios, donde vivirán una “vida” de tortura sistemática.

4. EXPERIMENTOS SEXUALES

Actualmente, el NIH está financiando docenas de estudios horribles sobre comportamiento sexual, en los que a los animales les dañan el área de su cerebro vinculada con el placer sexual y les mutilan sus genitales.
A ratones y ratas similares a los ilustrados a continuación les amputan toda la piel de sus penes. Sus genitales son estimulados eléctricamente con electrodos e inyectados con productos químicos. Luego son asesinados y sus penes son diseccionados. En otros experimentos, los investigadores encerraron a ratones hembra en dispositivos para inmovilizarlos, les perforaron agujeros en el cráneo, y les causaron lesiones con quemaduras en el cerebro. Luego les presentaron muestras de orina de machos castrados y de machos no intervenidos, y se registró la cantidad de tiempo que pasaban olfateando cada muestra de orina. Todos los ratones fueron matados y diseccionados.
Luego, inmovilizaron a las ratas, cortaron sus cráneos, implantaron tubos en sus cerebros, y les administraron una sustancia química que bloquearía la capacidad de las ratas para procesar el placer sexual. Los investigadores observaron entonces a las ratas teniendo relaciones sexuales, las privaron de sexo durante siete a 28 días y observaron un mayor interés de las ratas en una recompensa de anfetamina. Todos los animales fueron matados y sus cerebros fueron diseccionados.


5. EXPERIMENTOS MILITARES

Cada año, se les dispara, apuñala, mutila y mata a más de 10.000 animales vivos durante crueles ejercicios de entrenamiento militar.
Ejercicios militares violentos como estos continúan regularmente en todo EE.UU., a pesar de que la mayoría de las instalaciones civiles y muchas de las militares ya han sustituido laboratorios de animales con superiores simuladores realistas que respiran, sangran e incluso “mueren”.

6. EXPERIMENTOS SOBRE EL FUMAR

Los autoridades de salud han sabido por décadas que fumar cigarrillos causa enfermedades y que los experimentos con animales son mediocres pronosticadores de estos efectos. Sin embargo, las empresas tabacaleras siguen obligando a los animales a fumar, a pesar de que existen alternativas más eficaces. Dos de las compañías de cigarrillos más grandes del mundo aún llevan a cabo experimentos de tabaco en animales, dolorosos e irrelevantes, a pesar de que no están obligadas por la ley y de que hay métodos superiores de experimentación sin animales disponibles.
Las gigantes del tabaco R.J. Reynolds y Philip Morris International continúan llevando a cabo horribles experimentos en animales. A los animales les bombean humo directamente en sus narices durante horas al día. Se les pela la piel, se les cae el cabello y sus ojos adoloridos les comienzan a supurar. Los investigadores les pintan su piel sensible con alquitrán y a veces se ven infestados de tumores.

No hay comentarios:

Publicar un comentario